lunes, 9 de marzo de 2020

La triste migración

 
La triste migración

En una exposición fotográfica,
me detuve ante el retrato
de un cuerpo con la espalda al desnudo
me dije, qué bonito lienzo
para plasmar, el oleaje
de un océano infinito.
Sentí una palmada en el hombro,
me giré
y expuesto en la pared opuesta
pude contemplar su rostro,
con la mirada perdida
y aquella impresionante cicatriz
que me hizo estremecer el alma,
si acaso tenemos alma
la crueldad de esas afiladas concertinas, no.